1. INTRODUCCIÓN
⌅Este trabajo integra un trayecto sostenido de investigación en torno a los procesos de racialización, las afrodescendencias y las negritudes en Argentina. Profundicé esta temática en proyectos individuales y grupales que se formalizaron a partir de 2012 (Broguet 2012Broguet, Julia. 2012. Saberes incorporados. Apropiaciones y resignificaciones de las danzas religiosas de orixás en un ámbito artístico rosarino. Tesis de Licenciatura en Antropología, Universidad Nacional de Rosario., Broguet, Picech y Rodríguez 2014Broguet, Julia, CeciliaPicech y ManuelaRodríguez. 2014. «“Argentina tiene un gran problema de identidad”: Resignificando lo propio y lo ajeno del candombe en el Litoral argentino», en CristinaDi Bennardis, Experiencias de la diversidad: 350-364. Rosario: UNR Editora.; Broguet et. al. 2019Broguet, Julia et. al. 2019. «Argentina, ¿de dónde sos? Estrategias performáticas y pedagógicas para abordar el racismo». Revista Brasileira de Estudos da presenca 1-31.; Citro et. al.2019Citro, Silvia et. al. 2021. «Performances indígenas y afrodescendientes en Argentina: Recreaciones sonoro-corporales de lo “ancestral”». Revista Colombiana de Antropología 57(2): 19-45.; Broguet 2019Broguet, Julia. 2019. «Salir de la blanquitud»: candombe afrouruguayo y categorías étnico-raciales en Paraná, Santa Fe y Rosario (fines del siglo XX-2015). Tesis de Doctorado, Universidad de Buenos Aires.; Broguet y Biassoni 2020Broguet, Julia y RominaBiassoni. 2020. Rosalía y el revés de las cosas. Historias cotidianas de infancias afrodescendientes. Rosario: Listo Calisto.)1
¿Qué sucede en Argentina en materia de políticas culturales públicas y afrodescendencias? ¿Qué hay realizado en Santa Fe? ¿Y en Rosario? Estos interrogantes surgieron de espacios de trabajo grupal y despuntaron el interés por indagar en políticas culturales y afrodescendencia en esta zona2
La bibliografía de políticas públicas y afrodescendencias cuenta con una amplia producción regional (Rangel, 2016Rangel, Marta. 2016. Políticas públicas para afrodescendientes: marco institucional en el Brasil, Colombia, el Ecuador y el Perú. CEPAL - Serie Políticas Sociales 220.). Asimismo, funcionarios y activistas locales establecen redes con países como Colombia, Uruguay y Brasil, mediante organizaciones, programas y/o universidades por las cuales circulan estrategias, discusiones, terminologías que inciden en la elaboración de políticas públicas nacionales –pero reducen su presencia en niveles provinciales y municipales de estatalidad5
En lo que refiere a los antecedentes nacionales, no rastreé producción académica sobre políticas públicas y afrodescendencias por fuera de Buenos Aires. Esta bibliografía académica tiene sólo algunos años y mayormente procede de la antropología. Su foco apunta a las políticas emanadas desde agencias estatales nacionales y a las articulaciones que tales agencias establecen con activismos afrodescendientes radicados sobre todo en la Capital Federal (Frigerio y Lamborghini 2011Frigerio, Alejandro y EvaLamborghini. 2011. «(De)mostrando cultura: estrategias políticas y culturales de visibilización y reivindicación en el movimiento afroargentino». Boletín Americanista 63: 101-120.; Ottenheimer y Zubrzycki 2011Ottenheimer, Ana y BernardaZubrzycki. 2011. «Afrodescendientes en Argentina: aproximación desde las políticas públicas». Question/Cuestión, 1(32). Disponible en: <https://perio.unlp.edu.ar/ojs/index.php/question/article/view/1275>; Zubrzycki, Ottenheimer y Maffia 2012; Annechiarico 2018Annechiarico, Milena. 2018. «Afrodescendientes y estado argentino: estrategias de visibilización, disputas y ambivalencias en el campo de las políticas culturales». Revista de Políticas Públicas e Segurança Social 2(2): 137-157.; Ocoró Loango 2018; Parody 2019Parody, Viviana. 2019. «Políticas culturales y afrodescendencia en Argentina: un análisis posible de sus configuraciones estatales en la etapa post-bicentenaria». REA 15: 1-23.). A excepción del artículo de Fernández Bravo (2014Fernández Bravo, Nicolás. 2014. «El regreso del cabecita negra. Ruralidad, desplazamiento y reemergencia identitaria entre los santiagueños “afro”», en FlorenciaGuzmán, LeaGeler y AlejandroFrigerio, Cartografias afrolatinoamericanas. Perspectivas situadas desde la Argentina. Buenos Aires: Biblos.:164) –quien trabajó en Santiago del Estero y señaló una «geopolítica aún determinada por la hegemonía de la ciudad capital» en la formulación de políticas públicas para las afrodescendencias del «interior» del país– hasta el momento no di con escritos que revisen en profundidad esta temática en otras regiones6
Para avanzar en este objetivo, la primera tarea iniciada en 2020 en el contexto de pandemia fue indagar en la emergencia de los activismos afrodescendientes en la ciudad durante la última década y su relación (o la casi falta de ella, en el caso del área cultural) con áreas estatales municipales y/o provinciales. Al realizar este mapeo reconocí la heterogeneidad de realidades que agrupan tales activismos y las problemáticas comunes que, circunstancialmente, los congregan. Asimismo, observé cómo inciden las acciones que movilizan sobre las (muy incipientes) políticas públicas generadas por el estado municipal y provincial para el sector. Para desplegar este interrogante trabajé inicialmente con relevamiento de noticias en portales (periódicos, diarios y páginas oficiales del gobierno provincial y municipal) aproximadamente de los últimos diez años. Este relevamiento integró un trabajo colaborativo desarrollado durante la pandemia COVID19 junto al Observatorio de Conflictividad Social de Mar del Plata, frente a las limitaciones para la realización de trabajo de campo presencial. Realizamos un raspado de información online sobre funcionarias/os, trabajadoras/es y referentes del sector cultural local en el periodo 2019-2022 (PICT 01160) y discutimos el tratamiento etnográfico de estas fuentes. También participé en eventos vinculados a los diferentes activismos (ferias, encuentros, actos). Asimismo, realicé entrevistas presenciales a dos activistas afrodescendientes –Pedro es migrante haitiano, residente en el país desde hace más de una década y estudiante de una carrera terciaria. María es afroargentina, de primera generación, y es profesora9
2. POLÍTICAS PÚBLICAS Y AFRODESCENDENCIAS EN ARGENTINA
⌅De la bibliografía consultada surge que, en Argentina, la situación de las personas afrodescendientes tomó cierta relevancia pública desde hace unos quince años, cuando se producen acciones del estado nacional orientadas al sector y, más (o menos), sostenidas y articuladas entre sí. Diferentes autores coinciden con que el 2001, año de realización de la Conferencia Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y las Formas Conexas de Intolerancia en Durban (Sudáfrica), representa una bisagra en la comprensión de los procesos y demandas políticas de las y los descendientes de africanos en la diáspora americana. Allí surgió el término afrodescendiente que permitió nominar una realidad común, tanto como heterogénea, a lo largo del continente y se instaló como el «lenguaje contencioso» que «establece los parámetros dentro de los cuales determinada lucha se desenvuelve» (Hale 2014Hale, Charles. 2014. «Entre lo decolonial y la formación racial: luchas afro-indígenas por el territorio y por (¿o en contra de?) un nuevo lenguaje contencioso». Cuadernos de Antropología Social. 40: 9-37.: 12). Mediante este término los activismos establecen interlocuciones con agencias estatales y organismos transnacionales.
El estado argentino suscribió a la declaración de Durban, lo cual permitió el ingreso de «la temática afro» en la agenda del estado (Fernández Bravo 2013Fernández Bravo, Nicolás. 2013. «“¿Qué hacemos con los afrodescendientes? Aportes para una crítica de las políticas de la identidad», en FlorenciaGuzmán y LeaGeler, Cartografías afrolatinoamericanas. Perspectivas situadas para analisis transfronterizos. Buenos Aires: Biblos.: 246). Esto aportó «un importante marco jurídico internacional para la protección de los derechos de los afrodescendientes» (Ocoró Loango 2020Ocoró Loango, Anny. 2020. «Del kirchnerismo al macrismo: afrodescendientes, política y estado en la Argentina», en RosaSeptien Campoalegre, Afrodescendencias: voces en resistencia. Buenos Aires: CLACSO.: 268) y se transformó en un instrumento legal para exigir el reconocimiento de la existencia de una población negra argentina. Pocos años después, en el 2005, el estado nacional elaboró el documento Hacia un Plan Nacional contra la Discriminación (PNCD-Decreto 1086/2005) que se mantiene hasta hoy como guía rectora de la actividad global del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI)10
Pese a que estas normativas derivaron en algunas políticas nacionales, las mismas impactan de manera profundamente desigual en el territorio argentino y advertimos una distancia significativa entre las actuaciones del estado nacional y los estados provinciales11
En esta línea, considero operativo observar las políticas públicas como el «conjunto de acciones y omisiones que manifiestan una determinada modalidad de intervención del Estado en relación con una cuestión que concita la atención, interés o movilización de otros actores de la sociedad civil» (Oszlack y O´ Donell 2007Oszlack, Oscar y GuillermoO´ Donell. 2007. «Estado y políticas estatales en América Latina: hacia una estrategia de investigación». Lecturas sobre el Estado y las políticas públicas: Retomando el debate de ayer para fortalecer el actual. Buenos Aires: Proyecto de Modernización del Estado de la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación.: 565. Subrayado propio). Es decir que lo que se omite en el diseño de acciones estatales sobre la realidad de diferentes sectores sociales es igualmente significativo que aquello que se efectiviza. Desde este punto de vista, las políticas estatales son «nudos» de un proceso social que no puede entenderse ni explicarse «prescindiendo de las políticas de otros actores» de la sociedad civil (Oszlack y O´ Donell 2007Oszlack, Oscar y GuillermoO´ Donell. 2007. «Estado y políticas estatales en América Latina: hacia una estrategia de investigación». Lecturas sobre el Estado y las políticas públicas: Retomando el debate de ayer para fortalecer el actual. Buenos Aires: Proyecto de Modernización del Estado de la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación.: 567) –en este caso, de los activismos afrodescendientes y actores institucionales y particulares que articulan y acompañan las acciones de tales activismos–. Como parte de un movimiento dialéctico, los actores sociales pueden reforzar, rechazar, confrontar las acciones políticas que se generan desde ámbitos estatales (Achilli 1998Achilli, Elena. 1998. «Vivir en la pobreza urbana. El derecho a una interculturalidad no excluyente». Revista Lote 18. Disponible en: <http://www.fernandopeirone.com.ar/Lote/nro018/achilli.htm> Fecha de acceso: 24 ene. 2024.), así como proponer, crear y sostener otras. Mi anticipación hipotética es que lo que se avanzó hasta ahora en materia de políticas públicas para las afrodescendencias, se desplegó según la estructura centralizada del estado argentino, no consideró con justeza las diferentes realidades provinciales y, en general, puso como principales interlocutores de estas políticas a activistas afrodescendientes que radican en ciudad de Buenos Aires. Como ya adelanté, y a contramano de esta tendencia, me interesa atender a un nivel contextual más acotado –sin perder de vista interrelaciones con niveles nacionales y transnacionales pero sin detenerme en ellas– para identificar aquellos «procesos socio-políticos generalmente silenciados/reducidos tras las [en este caso, embrionarias y dispersas] políticas estatales» orientadas a las afrodescendencias; y comprender «el espacio público de la lucha de intereses diferenciados» (Achilli 1998Achilli, Elena. 1998. «Vivir en la pobreza urbana. El derecho a una interculturalidad no excluyente». Revista Lote 18. Disponible en: <http://www.fernandopeirone.com.ar/Lote/nro018/achilli.htm> Fecha de acceso: 24 ene. 2024.) en el que estos procesos se desenvuelven.
2.1. Sobre afrodescendencias y negritudes en el contexto nacional
⌅Para profundizar el recorrido quisiera señalar, primero, la heterogeneidad de trayectorias grupales/individuales y de escenarios históricos que subsumirá la noción afrodescendiente/afrodescendencias en el escrito. En esta oportunidad adopté una descripción amplia que permitiera considerar las diferentes experiencias afrodescendientes en Rosario y retomé la definición censal consensuada entre el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) y activistas afrodescendientes para el relevamiento de esta población en el territorio nacional. Según esta, «afrodescendiente» es aquella «persona que se reconoce descendiente de la diáspora africana en el mundo o perteneciente a ésta»12
Aunque el trabajo no se centra en los procesos identitarios que atraviesan las y los activistas rosarinos, considero necesario hacer una digresión sobre algunos dilemas que abre esta terminología transnacional. El término afrodescendencia/afrodescendiente reviste variaciones respecto a cómo se expresa en las corporalidades. Es decir, a cómo las corporalidades afrodescendientes son percibidas histórica y socialmente en el ámbito local; y a cómo tal percepción condensa, articula o enfrenta distintas categorías de negritud que, además, se sobreponen y/o acoplan a otras clasificaciones sociales (clase, género, edad, procedencia).
En investigaciones previas (Broguet 2019Broguet, Julia. 2019. «Salir de la blanquitud»: candombe afrouruguayo y categorías étnico-raciales en Paraná, Santa Fe y Rosario (fines del siglo XX-2015). Tesis de Doctorado, Universidad de Buenos Aires., 2021Broguet, Julia. 2021. «El “Centro” y los “barrios” Candombe afrouruguayo, límites sociales y étnico-raciales en el espacio urbano de Paraná y Santa Fe (Argentina)». Cuadernos de Antropología Social 54: 115-132.) expuse usos y sentidos nacionales del término «negro» (que exceden lo vinculado a lo afrodescendiente, incluyen lo indígena y «lo mezclado» –en alusión a una «mezcla» de extracciones étnico-raciales europeas y no europeas- y se entrecruza con la posición de clase) entre practicantes de candombe afrouruguayo de ciudades del Litoral argentino. En paralelo a registrar una débil identificación con el termino afrodescendiente, observé que algunas/os de ellas/os sí se reconocían «negros» y reivindicaban alternativamente antepasados afrodescendientes y/o indígenas, lo que complejiza las dinámicas raciales locales. Como veremos, las categorías de negritud movilizan, según las circunstancias, sensaciones, emociones y sentidos que pueden inscribirse simultáneamente en 1) la propia historia nacional argentina; 2) en los contextos nacionales de origen de las personas migrantes en Rosario y; 3) en circuitos transnacionales trazados por la dinámica global que asumió la construcción de un imaginario racial a lo largo de la moderno-colonialidad. De modo tal que la percepción de las corporalidades afrodescendientes y/o negras en el entorno local navega entre imaginarios racializados con alcances nacionales y transnacionales.
«Afrodescendiente» es un término con el que, por diferentes motivos, no todas las personas con las que dialogué se reconocen. Por lo tanto, aquí actúa como una definición operativa que permite acercarse a una problemática local emergente, pero resulta insuficiente al momento de expresar la complejidad de los procesos de identificación/asignación que comprende. Si el término «negro» en Argentina incluye y excede a la afrodescendencia y refiere a alguna característica corporal (a rasgos físicos, comportamientos sociales, atuendos); el término «afrodescendiente» pretende contrarrestar el estigma alojado en la raíz colonial del primero evitando la referencia a la corporalidad y enfatizando un origen africano. Sin embargo, su uso «políticamente correcto» (Restrepo 2013Picconi, Ma. Lina. 2015. Procesos de reemergencia de colectivos afrodescendientes en la ciudad de Córdoba a comienzos del siglo XXI. Tesis de Maestría en Antropología, Universidad de Buenos Aires.) no ahorra la circulación de prejuicios raciales en diferentes ámbitos, incluso dentro de los activismos.
Como señalaba una activista rosarina, si bien hay afroargentinas/os que no se autoperciben «afro por su color de piel sino por su ascendencia», el «colorismo»13
Finalmente, en lo que relevé hasta el momento en Rosario en relación con la situación de migrantes de origen haitiano y africano, mis interlocutores escogieron otras denominaciones y en mucha menor medida «afrodescendiente». Una integrante argentina de una de las asociaciones africanas enfatizaba que «su pareja no era afrodescendiente, sino africano» pero que sí lo eran los hijos que tenían en común, nacidos en el país. Otros eligen denominaciones vinculadas a su procedencia nacional («haitiano/a»), continental («africano/a») o racial («negro/a/e») o a sus combinaciones (por ejemplo «soy negro haitiano»). Incluso cuando el sentido de lo negro con el que se identifican entra en contradicción con las categorizaciones locales de negritud14
La ambigüedad entre las categorizaciones y la autopercepción abre un amplio espectro de experiencias que recorren a las afrodescendencias y/o negritudes en el ámbito local y nacional y develan zonas en común, así como importantes diferencias en términos de situaciones, reclamos y necesidades. Tal escenario diseña un panorama desafiante para pensar los diálogos entre los activismos entre sí y con organismos estatales municipales, provinciales y nacionales y la elaboración de políticas públicas que combatan el racismo en el país.
2.2. Los activismos afrodescendientes en la ciudad de Rosario
⌅En este apartado mapeo las organizaciones afrodescendientes presentes en la ciudad de Rosario y, a partir de esta caracterización, describo las acciones desplegadas a nivel provincial y a nivel local.
Santa Fe es una provincia de la denominada Región Centro. Su capital es la ciudad homónima y según el censo realizado en el 2022, su población es de 3.519.059 habitantes. Sobre este total poblacional 16.560 personas declararon tener antepasados afrodescendientes o africanos; y 57.193 se reconocieron como descendientes o pertenecientes a algún pueblo indígena u originario.
La ciudad de Rosario se ubica sobre el Río Paraná, al sur de la ciudad capital. Según datos del censo realizado en el año 2010 su población es de 1.337.958 habitantes y se ubica como la tercera ciudad más grande del país15
En trabajos previos (Broguet, Picech y Rodríguez 2014Broguet, Julia, CeciliaPicech y ManuelaRodríguez. 2014. «“Argentina tiene un gran problema de identidad”: Resignificando lo propio y lo ajeno del candombe en el Litoral argentino», en CristinaDi Bennardis, Experiencias de la diversidad: 350-364. Rosario: UNR Editora.; Broguet 2019Broguet, Julia. 2019. «Salir de la blanquitud»: candombe afrouruguayo y categorías étnico-raciales en Paraná, Santa Fe y Rosario (fines del siglo XX-2015). Tesis de Doctorado, Universidad de Buenos Aires.) planteamos que mientras en la ciudad capital la presencia afrodescendiente histórica y actual logró bastante visibilidad pública, en Rosario los activismos afrodescendientes emergen en la última década. ¿Esto significa que en la ciudad no hubo/no hay población afrodescendiente? No. Rosario no fue ni es una excepción respecto a una realidad que recorrió y recorre buena parte del territorio argentino17
En la ciudad los activismos afrodescendientes interrogan esta narrativa urbana. Siguiendo la definición de afrodescendencia adoptada, se inician formalmente con la aparición de la Asociación Africana en el año 2012 frente a una demanda muy específica sobre su voluntad de participar en un evento local masivo de tipo cultural-gastrónomico (Gattari 2019Gattari, Mariángeles. 2019. «Migración africana subsahariana hacia la Argentina. Trayectorias migratorias, experiencias cotidianas y modos de organización de los migrantes africanos en la ciudad de Rosario». XV Jornadas Rosarinas de Antropología Sociocultural.). Luego, en 2017, se constituye la Asociación Civil Haitiana y en 2019 comienzan a aparecer organizaciones que nuclean a mujeres afroargentinas y afroamericanas.
Propongo un esquema ordenador en el que, a grandes rasgos, pueden pensarse dos líneas dentro del activismo local. La primera está vinculada a organizaciones que tienen en común –en circunstancias diferentes– la realidad de la migración y el hecho de agruparse –quizás por eso mismo– bajo figuras legales. Como mencioné, la Asociación Africana es la primera en conformarse legalmente y luego se escinde según la pertenencia nacional: la Asociación Civil de Tanzania, la Asociación Senegalesa y la Unión Países África del Oeste -Liberia, Sierra Leona y Costa de Marfil- (Gattari 2019Gattari, Mariángeles. 2019. «Migración africana subsahariana hacia la Argentina. Trayectorias migratorias, experiencias cotidianas y modos de organización de los migrantes africanos en la ciudad de Rosario». XV Jornadas Rosarinas de Antropología Sociocultural.). Hasta el año 2019 se estimaban alrededor de 40 y 60 migrantes de origen africano, mayormente hombres que en general trabajaban en la venta ambulante (op. cit.). Algunos de ellos conformaron familias y tuvieron hijos con parejas argentinas. Años más tarde se conforma la Asociación Civil Haitiana. La migración haitiana comienza a adquirir mayor visibilidad en Rosario tras el terremoto del año 2010 en Haití. Entre ese año y el 2013 la Dirección Nacional de Migraciones registró un total de 4.658 haitianos que ingresaron al país (Duffard 2016Duffard, Evangelista. 2016. Del caribe haitiano a la Argentina: trayectorias de cuerpos en movilidad humana posterremoto 2010. Ciudad Autónoma de Buenos Aires: CLACSO.). En el ámbito local y según cálculos de la Asociación –no existen datos oficiales–, actualmente habitan alrededor de 2500 haitianas/os (Barrandeguy 2017Barrandeguy, Tomás. 2017. Haitianos, más de 2.500 historias de una comunidad que crece en la ciudad. Disponible en: <https://www.lacapital.com.ar/la-ciudad/haitianos-mas-2500-historias-una-comunidad-que-crece-la-ciudad-n1338558.html> Fecha de acceso: 26 jun. 2023.). El tipo de proyecto migratorio con el que en general se identifican las y los jóvenes haitianos que residen en Rosario es «un proyecto familiar con fines de formación universitaria» (Kesner 2021Kesner, Jean. 2021. De las Perlas de las Antillas al litoral del Paraná. La migración de los haitianos en Rosario entre los años 2010-2018.Tesina de Grado, Licenciatura en Ciencias Políticas, Orientación en Administración Pública, Universidad Nacional de Rosario.: 12). Por tal motivo, la Asociación firmó convenios con la Universidad Nacional de Rosario donde se imparte un «Taller de kreyòl ayisyen y cultura haitiana» para la comunidad y un «Taller de Español como lengua para la Inclusión Ciudadana».
La segunda línea es más reciente y se formaliza en 2019 con el surgimiento de la organización Afro Mujeres y Disidencias Rosario. Comienza a gestarse unos años antes pues algunas de sus impulsoras, mayormente mujeres argentinas, compartían espacios de prácticas culturales afroamericanas, como el candombe afrouruguayo, donde venían interrogándose sobre su afrodescendencia y el racismo local (Broguet 2019Broguet, Julia. 2019. «Salir de la blanquitud»: candombe afrouruguayo y categorías étnico-raciales en Paraná, Santa Fe y Rosario (fines del siglo XX-2015). Tesis de Doctorado, Universidad de Buenos Aires.). Un hito importante para su irrupción fue la realización del Encuentro Nacional de Mujeres que se hizo en Rosario en 2016, en cuyo marco funcionó por primera vez el taller denominado «Mujeres y Afrodescendencia» que permitió conversar con otras compañeras que se estaban haciendo preguntas similares. Está línea se entrama con las discusiones abiertas por el feminismo en los últimos años, tiene una impronta generacional muy fuerte –son mujeres y disidencias de entre 25 y 35 años aproximadamente-, afroargentinas –salvo algunas excepciones, muchas de ellas de primera generación, de madres o padres migrantes- y afroamericanas y afroamericanas –de países como Panamá o Brasil–. El reclamo se centra en la cuestión de género desde una perspectiva antirracista. En el 2020 se crea el Bloque Antirracista Rosario, una organización mixta de «personas racializadas y no racializadas, afrodescendientes, indígenas y gitanes de Argentina y migrantes». El Bloque surge de la necesidad de generar un espacio «más inclusivo, más grande, no tan puntual sobre el género» (RE n°1, activista afroargentina, Rosario 2021) y se aboca a la denuncia de situaciones de racismo en Rosario, lo cual ha impulsado movilizaciones frente a casos particulares realizadas en el periodo de pandemia COVID-19.
2.3. Actuaciones estatales orientadas a las afrodescendencias en la provincia de Santa Fe
⌅Como planteé, me interesa abordar lo que sucede en la ciudad de Rosario en materia de políticas públicas orientadas a las afrodescendencias, en el contexto de la provincia de Santa Fe. Tal decisión involucra identificar las articulaciones (o la falta de ellas) entre dependencias del estado provincial y municipal, de éstas con algunas del estado nacional y de todas ellas con los activismos presentes en Rosario, a fin de reconocer los procesos socio-políticos implicados.
Dado que describo un desarrollo emergente en el contexto provincial, abordo la gestión liderada por el Frente de Todos18
Esta Secretaría de Derechos Humanos y Diversidad articuló con el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación (ambas gestiones pertenecen al Frente de Todos). En los primeros días de marzo de 2021 un funcionario nacional y activista afrodescendiente, entonces a cargo de la Dirección Nacional de Equidad Étnico-Racial, Personas Migrantes y Refugiadas, visitó la ciudad de Rosario y en un encuentro inédito se reunió con integrantes de la Secretaría, organizaciones y activistas locales. En enero de ese mismo año, en Rosario se había generado una convocatoria igualmente excepcional en respuesta a ataques y amenazas virtuales recibidos por estudiantes afrodescendientes de la Universidad Abierta Interamericana, con mensajes como «Negros, no deberían estar acá, tampoco vivos». Las articulaciones que estaban tejiéndose en Rosario entre migrantes afrolatinoamericanos y afroargentinas/os empiezan a darle una mayor visibilidad a situaciones de racismo dirigidas a población migrante afroamericana. La movilización fue convocada por el Bloque Antirracista frente a un Centro Territorial de Denuncia, congregó a unas 50 personas y tuvo el apoyo de organizaciones sociales, sindicales y políticas21
Aunque recibió escasa atención en medios locales, lo sucedido se divulgó en agrupaciones afrodescendientes porteñas a través de redes entre Rosario y Buenos Aires. A dos meses de la movilización, se produce la primera reunión de este funcionario nacional con funcionarios provinciales, integrantes del Bloque Antirracista y algunos migrantes africanos22
Sobre las actuaciones estatales provinciales vinculadas con la cartera de educación, identifiqué dos acciones. Primero, la adhesión de la provincia a la Ley Nacional N° 26852 que incorpora el «Día Nacional de las personas afroamericanas y de la cultura afro» (Ley provincial N° 14103) al calendario oficial provincial y designa como autoridad de aplicación al Ministerio de Educación y de difusión al Ministerio de Cultura. Esta gestión fue impulsada por la Casa de la Cultura Indoafroamericana de la ciudad de Santa Fe junto a una diputada provincial socialista, lo retomo por la relevancia de esta organización en la provincia y por lazos establecidos con la segunda línea del activismo rosarino. Además, esta acción educativa se vincula con la realización del trayecto de formación docente continua «Volvernos visibles. La intervención en las prácticas educativas desde una perspectiva afrodescendiente», efectuado en Rosario durante 2022 y sin antecedentes en Santa Fe. Esta formación se hizo en la escuela N°90 «María Remedios del Valle», renombrada así en 202124
Según palabras de la directora de esta institución que realiza un trabajo sostenido sobre racismo y afrodescendencia con perspectiva de género, la idea inicial fue realizar una formación para las y los docentes de la propia escuela (RE n°3, directiva escuela N°90 2022, Rosario). Sin embargo, frente al interés que suscitó la temática y a la inexistencia de propuestas formativas provinciales en esta línea, distintas escuelas primarias se agruparon para solicitar una capacitación con un cupo de 50 personas, entre quienes hubo trabajadores docentes, directivas/os y supervisores/as, de todos los niveles (inicial, primaria, secundaria y superior) y modalidades. El cursado se organizó en una parte expositiva y una práctica y como trabajo final propuso el armado de un protocolo antirracista –en el caso de directivas/os–, y la planificación de tres actos escolares –para docentes–.
La aprobación del expediente se trabó en varias oportunidades y no lograba asegurarse un presupuesto. Sin embargo, mediante las gestiones de las directivas de la institución, lxs activistas locales y el también activista afrodescendiente y funcionario nacional que trabaja en la cartera de Derechos Humanos de Nación, el proyecto logró pasar por la Subsecretaría de Desarrollo Curricular y ser aprobado. Como nos describía una de nuestras interlocutoras, esta aprobación se resolvió como una «cuestión política» en la que «Nación le bajó línea a Santa Fe para que lo haga». Los fondos para su concreción los gestionó la provincia, pero «dentro del presupuesto [nacional] para formación», que adjudica el Instituto Nacional de Formación Docente (INFOD).
Para concluir este apartado, quiero señalar dos emergentes. Por un lado, en la gestión de la cartera de Derechos Humanos y en la de Educación (no así en la adhesión de la provincia a la Ley Nacional N° 26852), el papel de este activista y funcionario nacional -del mismo signo político que el provincial-, fue significativo para la articulación con organizaciones afrodescendientes locales. Por otro lado, mientras que las actuaciones de Derechos Humanos se volcaron a situaciones vinculadas sobre todo a la población migrante afrodescendiente, la de Educación atendió realidades más relacionadas con las demandas de organizaciones afroargentinas/os, referidas a la revisión del currículo escolar desde una «perspectiva afrodescendiente» y la problemática del racismo local. Finalmente, no registré acciones de estas dependencias que articulen con niveles municipales de estatalidad.
2.4. Actuaciones municipales orientadas a las afrodescendencias en la ciudad de Rosario
⌅Hasta aquí describí actuaciones del estado provincial santafesino desplegadas en los últimos años, con epicentro en la ciudad de Rosario y de las que participaron activistas rosarinas/os. En este apartado avanzo sobre interlocuciones de los activismos afrodescendientes locales con dependencias del estado municipal que, de manera esporádica, responden a ciertos reclamos. Comienzo por las acciones resultantes de los diálogos que estableció la primera línea del activismo local con niveles municipales de estatalidad25
Además de la visibilidad pública que brinda la participación en el mismo, este encuentro genera posibilidades laborales y recursos económicos concretos para sus participantes. El reclamo por ser incluidos fue impulsado por migrantes africanos, mayormente varones, quienes en el año 2009 comenzaron a participar de manera informal con un stand ubicado fuera del predio oficial (Gattari 2019Gattari, Mariángeles. 2019. «Migración africana subsahariana hacia la Argentina. Trayectorias migratorias, experiencias cotidianas y modos de organización de los migrantes africanos en la ciudad de Rosario». XV Jornadas Rosarinas de Antropología Sociocultural.). Esta acción contó con la anuencia de la Municipalidad, pero no estuvo exenta de conflictos26
Este reclamo de organizaciones migrantes se vinculó fundamentalmente con la demanda laboral, un aspecto agravado por la pandemia, en especial entre migrantes africanos varones cuya casi única salida laboral es la venta ambulante27
Otra de las acciones municipales surgidas de un reclamo del activismo local, tuvo como cara visible al presidente de la Asociación Africana y se produjo a partir de situaciones de discriminación racial vividas por migrantes afrodescendientes en locales bailables de la ciudad. En septiembre de 2018, esta Asociación expuso en medios rosarinos experiencias padecidas por migrantes africanos/as y haitianos/as (Rosario 3, 26/9/18Rosario 3. 2018. Colectividad africana denunció discriminación en bares y boliches. Disponible en: <https://www.rosario3.com/noticias/Colectividad-africana-denuncio-discriminacion-en-bares-y-boliches-20180926-0053.html> Fecha de acceso: 26 jun. 2023.), lo que derivó en una reunión con funcionarios del municipio dónde se acordó incorporar la temática del racismo y la xenofobia a una formación en derechos humanos en curso que dependía de la Secretaria de Control y Convivencia de la Municipalidad.
Se trata de una capacitación integral (Ordenanza 8522/2010) para los llamados Controlador/as de Admisión y Permanencia (ACAP) en locales bailables, espectáculos y eventos masivos de la ciudad, comúnmente conocidos por la expresión «patovicas». Se inició alrededor del año 2011 durante la gestión del intendente socialista Miguel Lifschitz, y se denominó «Formación y sensibilización en derechos y juventudes para actores que desempeñan funciones en los locales nocturnos u otros espectáculos» pues integraba una iniciativa en torno a los Escenarios Nocturnos, enmarcada en el Plan Integral de Juventud que contempló la participación de más de 900 jóvenes rosarinas/os.
A partir del reclamo de organizaciones afrodescendientes, a los dos módulos en los que se abordan los Derechos Humanos, fueron invitadas/os migrantes afrodescendientes con diferentes orígenes nacionales –un ganhés, un haitiano y una cubana-, a quienes los conectó el hecho de haber padecido alguna situación de discriminación racial y xenofobia que afectó su libre circulación por la noche rosarina.
Abro un paréntesis dado que esta experiencia es sugerente para pensar aristas de una temática que la presencia afrodescendiente en la ciudad visibiliza de manera evidente: el racismo rosarino. La problemática de las violencias racistas y xenófobas en los ingresos a espacios de entretenimiento nocturnos es frecuente y afecta a diferentes poblaciones. Con esta capacitación, inicialmente el municipio rosarino tomó la temática de la noche y las juventudes, una población muy afectada por esta realidad29
De acuerdo a la segunda edición del Mapa Nacional contra la Discriminación, los boliches son el cuarto ámbito donde los jóvenes experimentan situaciones de discriminación (La Capital 2015)31
En Rosario, -como en otras ciudades del país con tamaño y características similares, como Córdoba- la «portación de rostro», vinculada a la racialización de jóvenes de sectores populares como «negros» (por su color de piel, rasgos y atuendos) (Bonvillani 2019Bonvillani, Andrea. 2019. «“Negros de alma”. Imaginarios racializados y juvenicidio en la Córdoba de las campanas». Tabula Rasa 31: 325-346.) y a las personas afrodescendientes –sobre quienes no hay datos estadísticos precisos- representa un impedimento para recorrer libremente la noche.
La pregunta que surge entonces es: ¿cómo ampliar el debate sobre el racismo rosarino -que vienen poniendo sobre la mesa los activismos afrodescendientes y que desde hace más de una década el estado nacional asumió el compromiso de combatir-, también hacia estas poblaciones racializadas, mayormente jóvenes de sectores populares, que «portan rostro»? Como expuse, esta población juvenil no siempre reivindica una identidad étnico-racial particular pero sufre las consecuencias del racismo local.
Esta relación motoriza otras inquietudes: ¿Cómo pensar políticas públicas desde una perspectiva que contemple las opresiones cruzadas de manera situada y contextual? Es decir, considerar las opresiones étnico-raciales sin perder de vista las desigualdades de clase, por origen geográfico (a nivel urbano, nacional e internacional) y de género –entre otras variables según el contexto y los sujetos involucrados– ¿Cómo articular e incluir en el diseño de políticas públicas las diferentes formas que asume el racismo en Argentina y que tiene, muchas veces, consecuencias letales? ¿Qué pasaría si en la formación que ofrece la municipalidad para quienes controlan el ingreso a locales bailables, se sumaran jóvenes de organizaciones de barrios populares que trabajan la discriminación racial y las violencias institucionales en Rosario?33
En lo que respecta a la segunda línea del activismo afrodescendiente en Rosario, hasta el momento relevé dos acciones puntuales que tuvieron como puntapié la temática de género y, por eso mismo, a la figura de María Remedios del Valle. Una de ellas fue una iniciativa impulsada por un concejal de la Coalición Cívica-ARI junto a la Asociación Civil Casa de África. Fue una de las primeras actividades sobre la temática afroargentina realizada en el Concejo Municipal y homenajeó a la figura de María Remedios en marzo del 2020, en el marco del Día Internacional de la Mujer. Para esta ocasión fueron invitadas organizaciones afrodescendientes como la Casa de la Cultura Indoafroamericana, la Asociación Civil Haitiana y Afromujeres y Disidencias.
Otra de las actividades fue impulsada por el Centro Cultural «Parque de España» con el auspicio de la Municipalidad de Rosario y la participación de la Secretaria de Género y Derechos Humanos de la ciudad34
«Estas personas que hoy en día se reconocen como afrodescendientes empiezan a hacer un rescate de su identidad que tiene que ver con darles visibilidad a estos procesos de racismo, de racialización sistemática que a veces, porque son invisibles, no podemos revisarlos; y como no podemos revisarlos, no podemos modificarlos. (…) existe en nuestra cultura un proceso donde naturalizamos poner en ese lugar de ciudadanos de segunda a personas racializadas. Entonces desandar este camino tiene que ver con acciones positivas por parte del Estado, acciones principalmente orientadas a la educación, a la cultura y, por supuesto, al reconocimiento de derechos avasallados» (23ª Reunión, 1ª Sesión de Prórroga, 2º Período del Concejo Municipal de Rosario, 15/12/22).
El énfasis en las personas que sufren las consecuencias de las dinámicas locales de racialización –lo que incluye a las y los afrodescendendientes, pero también a otros grupos sociales- y su consideración como «ciudadanos de segunda» indica que desde esta línea del activismo local integrada por afroargentinas/os y afroamericanas/os, hubo debates en torno a las dinámicas heterogéneas y situadas en las que se produce el racismo en el país y en cada provincia (Broguet 2019Broguet, Julia. 2019. «Salir de la blanquitud»: candombe afrouruguayo y categorías étnico-raciales en Paraná, Santa Fe y Rosario (fines del siglo XX-2015). Tesis de Doctorado, Universidad de Buenos Aires.; Broguet y Rodríguez 2022). Asimismo, tal referencia indica que en esta línea se dieron articulaciones con organizaciones sindicales y políticas que se sumaron a las incipientes movilizaciones contra el racismo realizadas en 2020, tal como indiqué en párrafos previos. Estas vinculaciones permiten pensar en un terreno en común desde donde dirimir y combatir las consecuencias del racismo y la violencia institucional local y enfatiza la necesidad de acciones puntuales por parte de organismos municipales.
3. PALABRAS FINALES
⌅Hoy, de cara al radical giro político que se dio a nivel nacional en las últimas elecciones, los procesos que analicé aquí se abren a un escenario de gran incertidumbre. El propósito de este escrito fue hacer una primera aproximación a las vinculaciones entre diferentes niveles de estatalidad provincial, municipal y nacional con los activismos afrodescendientes de la ciudad de Rosario, en el contexto de la provincia de Santa Fe. A fin de realizar un aporte a los antecedentes sobre políticas públicas y afrodescendencia en Argentina mayormente orientados al análisis de las políticas nacionales con epicentro en Buenos Aires, abordé la problemática desde una escala local que contempló el contexto provincial, nacional y transnacional en el que se despliega. Esto me permitió observar que las acciones nacionales –permeadas por las demandas de un contexto transnacional- son retardatarias en su impacto en la provincia y, mucho más, en niveles locales de estatalidad, como Rosario.
En lo que refiere al ámbito local, comienzan a identificarse acciones aisladas del estado municipal como respuesta a situaciones conflictivas (violencia policial, reclamos laborales, discriminación racial) y se observa cómo la organización de parte del sector en figuras legales (asociaciones civiles), permitió otras interlocuciones con funcionarios. Como planteó un funcionario municipal en una nota periodística a un medio local, «se reacciona por las demandas» de los activismos (Robins, 2022Robins, Ricardo. 2022b. Rubén Chababo: Hay seres desechables, las masas humanas sin lugar en el sistema crecen. Disponible en: <https://www.rosario3.com/informaciongeneral/Ruben-Chababo-Hay-seres-desechables-las-masas-humanas-sin-lugar-en-el-sistema-crecen-20220527-0063.html> Fecha de acceso: 26 jun. 2023.): por las condiciones de acceso al trabajo de un migrante ghanés, por una situación de violencia xenófoba y racista a una joven migrante haitiana en un kiosco o por una formación docente que revierta la exclusión de africana/os y afrodescendiente en la conformación de la sociedad argentina y contemple una perspectiva antirracista. Son reclamos diversos que, sin embargo, se encuentran atravesados por una historia en común: la construcción de una Argentina blanca-europea.
Tal como observé en el escrito y en consonancia con investigaciones en otras provincias (Fernández Bravo 2014Fernández Bravo, Nicolás. 2014. «El regreso del cabecita negra. Ruralidad, desplazamiento y reemergencia identitaria entre los santiagueños “afro”», en FlorenciaGuzmán, LeaGeler y AlejandroFrigerio, Cartografias afrolatinoamericanas. Perspectivas situadas desde la Argentina. Buenos Aires: Biblos.; Picconi 2015Picconi, Ma. Lina. 2015. Procesos de reemergencia de colectivos afrodescendientes en la ciudad de Córdoba a comienzos del siglo XXI. Tesis de Maestría en Antropología, Universidad de Buenos Aires.), algunas de las acciones políticas registradas oscilan entre incluir la temática afrodescendiente en su vinculación con el racismo como un factor estructural que configuró al estado nacional argentino y; extranjerizar lo afrodescendiente ligándolo exclusivamente a la situación de la inmigración africana y/o afroamericana. Esta fluctuación también forma parte de las tensiones, debates y dinámicas organizativas del propio activismo a nivel local y nacional y, como expuse, no es sencillo generar acciones que expongan simultáneamente estas complejidades. Incluso estos extremos pueden adoptar formas que finalmente perjudican a todas y todos: un nacionalismo que excluye a migrantes afrodescendientes o una extranjerización de la temática que impide entender los procesos nacionales y las realidades situadas.
Como vimos, también hay posiciones que apuntan a tratar de reunir las realidades de la población afrodescendiente en reclamos comunes y sitúan una historia compartida vinculada a las consecuencias a largo plazo de la colonización y el proceso esclavista. Estos esfuerzos por tender puentes que permitan articular acciones conjuntas en el combate al racismo son necesarios si entendemos las persistencias tanto como las transformaciones que se están produciendo a nivel poblacional en la sociedad argentina. La propia existencia afrodescendiente en una Argentina blanco-europea supuso –y supone– un «trabajo» diario de construcción social de la realidad –que involucra agotamientos, desgastes, frustraciones– para romper un sentido común racializado muy arraigado. Así lo expresaba uno de nuestros interlocutores:
«Los hijos de los haitianos y haitianas están creciendo acá. Yo digo siempre una palabra fuerte, es una tormenta que viene, que los espera (…) todavía hay haitianos que piensan que en Argentina no hay personas negras. De hecho nosotros somos personas negras (risas), entonces hay, primero…. Ahora, vamos a ver si hay argentinos negros, también hay. Y hay haitianos que todavía dicen que no… Yo digo, escúchame ¿y tu hijo el que nació acá? es argentino (risas). Todo esto es un proceso... Hablo de tormenta, cuando me enteré de la presencia de los afroargentinos acá, todo el trabajo que tienen que hacer, la invisibilización que genera en la historia oficial del país (…) Los padres que son haitianos, van a tener un trabajo doble» (RE n° 2, 6/4/22, activista afrodescendiente haitiano, Rosario. Subrayado propio).